Si quieres saber qué es el lead time y su importancia en una red logística, sigue leyendo y te contamos todo lo que necesitas saber sobre el tema.
¿Qué es un lead time?
El tiempo de entrega es el tiempo entre que se ingresa un pedido en el sistema y que el cliente desea recibirlo. Es decir, el significado de tiempo de entrega está directamente relacionado con el tiempo restante entre la fecha de entrada del pedido y la fecha deseada.
Tipos de plazos de lead time
Ahora que sabemos qué es el lead time, podemos hablar de los diferentes tipos de lead time que existen.
En este sentido, podemos encontrar varios tipos de lead time que se adaptan a diferentes operaciones logísticas y diferentes productos. Sin embargo, los más comunes de todos son los tres siguientes:
- Plazo de entrega de fabricación: Este tipo de lead time se refiere al tiempo que transcurre desde que se comienza a fabricar un producto hasta que está completamente terminado y puede ser puesto al consumidor.
- Tiempo logístico: en este caso es el tiempo que transcurre entre la elaboración del producto y la entrega del pedido. Es decir, el tiempo de distribución en su totalidad, incluida la preparación y gestión de pedidos.
- Brecha de lead time de entrega: se refiere al tiempo necesario para anticipar las necesidades del cliente. Es decir, es el tiempo que se debe dedicar a la prevención de stock, lo que nos permite tener productos y mercancías disponibles cuando surge la demanda de cada cliente.
¿Qué mide cada tiempo de entrega a lo largo de la cadena de suministro?
Dependiendo de qué sección de la cadena de suministro analicemos y la perspectiva que adoptemos, el significado del tiempo de entrega puede variar ligeramente. Este concepto se puede descomponer en gráficos para entender cómo afecta a cada área:
- Gestión mercantil o mercantil: conocer con precisión en el lead time te permitirá comprometerte con una u otra fecha de entrega con los clientes.
- Compras o suministro: gestionar los plazos de los proveedores de materia prima es fundamental para garantizar que no haya desabastecimientos en la línea de producción.
- Plazo de producción: el lead time de fabricación facilita el cálculo de los lead time de fabricación y esto repercutirá en la logística y la gestión comercial.
- Logística y distribución: el tiempo logístico adquiere una dimensión integral: es necesario conocer el tiempo de suministro a otras zonas para saber cuánto tardará producción en fabricarlos, cuándo llegarán al almacén y cuánto tardarán en tratarlos. . y entregarlos al cliente
La importancia de tener un lead time logístico corto
Los principales objetivos de la logística son entregar los productos solicitados en un lugar específico, en el momento exacto y en las cantidades y condiciones requeridas. En la ecuación logística, el tiempo de entrega se refiere a la dimensión del tiempo, que está estrechamente relacionada con el nivel de servicio, pero tiene un impacto significativo en el control de inventario y la planificación de la demanda.
Los beneficios de tener tiempos de entrega reducidos se reflejan en:
- Planificación de la demanda más precisa: la realización de tareas de previsión de la demanda a corta de lead time permite una mayor precisión. Una de las principales reglas de la gestión de la demanda es que cuanto más lejano sea el futuro, mayor será la incertidumbre. Con lead time más cortos, es posible reducir esta incertidumbre, ya que permite realizar pronósticos más confiables y ejecutarlos con mayor precisión.
- Posibilidad de disponer de niveles de stock reducidos: un lead time corto permite operar con un menor volumen de stocks para satisfacer la demanda de los clientes. La razón fundamental por la que existe la gestión de inventario almacenado es para cubrir la diferencia de tiempo entre el momento en que un cliente realiza un pedido y el tiempo que tarda el proveedor en entregárselo. Los tiempos de suministro tienen un efecto lineal sobre la política de inventarios: cuanto mayor sea el tiempo de suministro, mayor será el stock almacenado y viceversa.
- Una mejora global en el servicio ofrecido al cliente: tener un lead time corto permite agilizar los plazos de entrega y cumplir con los compromisos del cliente. En la era de la Logística 4.0 y la logística omnicanal, la eliminación de pasos intermedios y la simplificación de los procesos resultan ser un valor añadido crucial para la empresa.
¿Cómo se calcula el lead time?
Para saber cómo se calcula el tiempo de entrega se deben tener en cuenta varios factores, tanto internos como externos. Sin embargo, también hay que tener en cuenta que existe una fórmula de lead time específica.
Esta fórmula del tiempo de entrega nos permitirá saber cómo se calcula el tiempo de entrega y obtener datos específicos que podremos utilizar siempre que sea necesario.
Ejemplos de lead time en una empresa
Ahora que sabemos qué es el tiempo de entrega y cómo se calcula, veamos algunos ejemplos específicos de tiempos de entrega.
- 24 horas: Esto es muy común, sobre todo en el caso de almacenes regionales o regionales, donde se debe reponer stock diariamente.
- 1 semana: Esto es generalmente común en el caso de mayoristas que envían productos a un espacio local o provincial.
- 3 meses: Esto es muy común en el caso de procesos logísticos que involucran envíos internacionales de productos, especialmente cuando se trata de envíos intercontinentales.
Además de estos ejemplos de lead time, hay muchos otros. Hay que tener en cuenta que cada producto y cada pedido tiene sus propias características y, por tanto, podemos encontrar ejemplos diferentes en casi cada caso concreto.
Con este indicador del lead time las empresas de logística saben de cuánto tiempo disponen para gestionar cada fase de todo el proceso logístico. De esta forma, el indicador lead time se convierte en una herramienta fundamental para optimizar los procesos de la cadena de suministro, tanto los relacionados con la producción como los destinados a la distribución del producto.
En este sentido, contar con herramientas logísticas especializadas es fundamental para mejorar los resultados y la calidad del servicio prestado a los clientes. Las rutas de entrega se pueden planificar con antelación y se puede supervisar todo el proceso logístico. De esta forma, se optimizan los recursos disponibles y se mejora la satisfacción del cliente gracias a un mejor servicio adaptado a las necesidades de cada consumidor.